viernes, 30 de noviembre de 2018

Conversación con Alvaro Matus sobre su libro "Monstruos Humanos"



¡Hola! La Frontera de los Libros tuvo el agrado de conversar con Alvaro Matus, sobre su libro "Monstruos Humanos". En esta interesante conversación nos habla de su obra, su trabajo de investigación, su blog dedicado a crímenes en general, música, etc. Además, nos comenta sobre los proyectos futuros e ideas para otras obras referente a la misma línea de la criminología.

¡Muchas gracias al autor por darse el tiempo de responder a tantas preguntas y por invitarnos a conocer sus obras!

P: ¿Por qué el título “Monstruos Humanos”?

R: A lo largo de la historia, se ha bautizado popularmente como “monstruos” a aquellos asesinos que han cometido crímenes particularmente atroces. El impacto que producen estos actos, hace que muchos quieran distanciarse de aquellos criminales que, a simple vista, son personas como todos nosotros. Incluso algunos monstruos de los cuentos de hadas, se han basado en criminales asesinos y no en criaturas mitológicas como habría de esperarse. Brujas, vampiros, hombres lobos y ogros, no son más que personajes que ocultan historias verdaderas de hombres y mujeres que infundieron el miedo en épocas pasadas, cometiendo barbaridades amparados en el anonimato. Pedofilia, asesinatos por placer, canibalismo, necrofilia… todo aquello, ni siquiera podría ser calificado como un comportamiento “animal”, sino aberrante. Se dice por ahí, que todos los monstruos son humanos… y creo que estoy de acuerdo. De ahí, el título del libro.

P: El libro, entiendo que nace de la idea de llevar al papel el blog que tienes desde hace varios años atrás sobre asesinos. ¿Por qué decides crear este blog? ¿El blog también está dedicado sólo a asesinos en serie o asesinos en general?

R: El blog nace a raíz de mi interés en torno a la criminología en general. Había visto otros blogs y páginas y, a decir verdad, la gran mayoría me resultaron poco exactos, con errores importantes en datos de varios casos. Mi idea era armar un espacio en la Web con información fidedigna y no un “copia y pega”. Para ello, utilicé diversas fuentes de respaldo para entregar biografías más completas. Por ejemplo, para redactar algunos casos, compré libros en español e inglés sobre ciertos casos y saqué de allí mis referencias. También vi infinidad de documentales y accedí a páginas realmente serias acerca del tema.

En el blog no solo se encuentran casos de asesinos seriales; sino también info sobre asesinatos en masa o crímenes que han conmocionado profundamente a nivel internacional. En conclusión, un compendio del crimen violento en general.

P: ¿Alguna vez imaginaste que ese conjunto de casos que has investigado se transformaría en un libro? ¿Cómo llevaste a cabo esa decisión o fue una petición de los seguidores del blog?

R: La verdad es que nunca pensé en un libro. Todos sabemos que encontrar apoyo editorial, son palabras mayores. Sumado al esfuerzo que ello implica, debes encontrar una temática que resulte relativamente “vendible” y, en el caso de los asesinos seriales por ejemplo, no es un tema tan conocido o popular acá como podría ser en Estados Unidos o España. Esto, principalmente, porque nos resulta un fenómeno un tanto ajeno al registrar muy pocos homicidas de estas características en Chile, más allá de lo que hemos visto por las series de televisión o películas al respecto. Sin embargo, me encontré con una muy buena acogida por parte de los seguidores del blog. Si bien había varios chilenos, la mayoría eran españoles, mexicanos y argentinos.

Como el blog fue creciendo, mucha gente comenzó a visitarlo constantemente y mencionaban que era uno de los espacios en Internet más serios y completos sobre el tema, y varios me preguntaban si tenía pensado escribir un libro al respecto. En ese momento, la idea de publicar fue tomando forma. Yo mismo tengo una enorme colección de libros sobre asesinos seriales y si bien hay algunos excelentes, otros dejan bastante que desear. Así fue como me animé a publicar.

P: ¿Cómo fue el trabajo investigativo sobre la historia de los asesinos en series que aparece en la primera parte del libro? ¿Trabajaste con algún historiador o fue una investigación propia?

R: Sobre estos casos, abunda mucha información la verdad. Existen libros completos y documentales dedicados exclusiva y exhaustivamente a Vlad Tepes o Elizabetn Bathory por ejemplo. Para el objetivo de este libro, el trabajo con un historiador no fue necesario.

P: Respecto al mismo proceso de escritura, ¿has recibido ayuda de algún psicólogo para entender de mejor manera la mente de los asesinos que están dentro de esta investigación?

R: Efectivamente. Tengo la suerte de tener varios amigos y amigas psicólogos/as y hemos discutido sobre asesinos en serie… durante años! Al ser una constante en mi vida, el tema de la criminología nunca estuvo ausente en nuestras juntas. Les mencionaba los casos que me impactaban y tratábamos de analizar el perfil del criminal, su infancia, sus motivaciones y así contrastábamos nuestras conclusiones con las de los especialistas que tuvieron la oportunidad de entrevistarlos cara a cara. En el fondo, mi labor ha terminado siendo periodística; pero también he ido aprendiendo algo de psicología forense por el camino, pues analizar perfiles psicópatas (por ejemplo) resulta bastante interesante cuando vas registrando estos casos.

P: Hablando de los casos que aparecen en los libros. ¿Cuál es el que más te impactó al momento de investigar?

R: La verdad es que hay varios que me han impactado, ya sea por la personalidad del asesino o los mismos asesinatos. El caníbal ruso, Andrei Chikatilo (el cual incluyo en mi libro), es uno de los que más llamó mi atención. Chikatilo devoró a 53 jóvenes entre los años 80 y 90 en la Ex Unión Soviética. Sus crímenes fueron tan sádicos y salvajes que, en un principio, se pensó que las víctimas habían sido introducidas en una segadora de trigo para, posteriormente, ser lanzadas en los gélidos bosques de Rostov. Cuando fue atrapado, con más de 50 años de edad, parecía ser un sujeto torpe, tímido y desaliñado; pero una vez que se presentó ante la corte, lucía irreconocible. Se rapó la cabeza, las cejas y vociferaba como un loco. Babeaba, se reía de los familiares de las víctimas y se desnudaba, posiblemente tratando de parecer un desquiciado y evitar la pena de muerte, aunque no lo consiguió. Era un asesino malvado, sádico y degenerado; pero plenamente consciente de lo que había hecho. Fue ejecutado en 1994 y pasó a la historia como uno de los peores asesinos seriales del mundo.

P: Leyendo el libro uno puede identificar que la mayoría de asesinos en serie proviene de Estados Unidos. ¿Eso se debe al acceso de información o efectivamente ese país tiene la mayor cantidad de este tipo de crímenes?

R: A la fecha, y desde hace más de 5 décadas, Estados Unidos registra la mayor cantidad de casos de asesinato en serie del mundo, aunque seguida de cerca de Rusia. Colombia, México y Brasil también aparecen como invernaderos de asesinos de esta naturaleza, y aunque el fenómeno aun es relativamente incipiente, ya está siendo estudiado.

P: ¿Qué opinas sobre la “admiración”, que se demuestra de distintas maneras, hacia estos asesinos en serie?

R: La verdad es que es algo relativamente normal hasta cierto punto, claro. Cuando se conocen casos de hombres y mujeres que rompen la ley y cometen una seguidilla de crímenes sin siquiera sentir arrepentimientos, la población en general los considera sujetos detestables. Pero, por otro lado, en algunos despierta cierta admiración. Esta admiración, seguramente, va de la mano de la fantasía en torno al sujeto que comete la acción: Alguien avezado, amoral, que no tiene sentimientos y que es capaz de hacer cualquier cosa con tal de cumplir con sus fantasías o metas en la vida… casi como el “superhombre” que postulaba Nietzsche en su filosofía. Es así como algunos pueden admirar a Al Capone, John Dillinger o Pablo Escobar, porque además de responder al falso estereotipo de “criminal romántico” que roba para darle a los pobres, eran sujetos sumamente inteligentes y astutos. El problema es que los asesinos en serie no son delincuentes ordinarios; sino psicópatas crueles, pervertidos y cobardes, a los cuales los mueve principalmente el sadismo y el asesinato en sí mismo. Entonces ¿Qué los hace atractivos para algunos? Posiblemente el simple hecho de que son “famosos” y la errada imagen que la TV o el cine nos ha dejado de ellos, como si todos fuesen un clon del carismático personaje que personificó Anthony Hopkins en el “Silencio de los corderos”.

P: Respecto a nuestros casos chilenos, sobre los psicópatas de Viña del Mar y el psicópata de Alto Hospicio, han circulado distintas teorías. ¿Tienen algún tipo de credibilidad esas teorías, según tu punto de vista?

R: Es muy difícil afirmar algo así. Si comienzas a documentarte con respecto a estos dos casos en particular, todo parece estar resuelto. Sin embargo, siempre van a haber vacíos.

Sobre los psicópatas de Viña del mar, se dice que Topp Collins y Sagredo no fueron los verdaderos autores de los crímenes y que se les acusó injustamente; aunque ellos mismos reconocieron todos los asesinatos y existieron varios testigos de sus ataques. Tras su detención y ejecución, no volvieron a registrarse casos similares en la región.

En el caso de Alto Hospicio, Julio Pérez Silva (el acusado) ahora se retractó de sus declaraciones iniciales, en donde confesó ser el psicópata asesino. Sin embargo, tras su detención, no se registraron más desapariciones en la zona. Aun así, existen versiones algo contradictorias que, bajo mi punto de vista, podrían ser verificadas.

P: Personalmente encontré que hubo mucho cuidado en entregar la información, tanto en los datos como en el lenguaje utilizado. Cuéntanos sobre la línea utilizada, ya que algunos autores podrían haber optado por inflar datos de asesinatos o utilizar un lenguaje más morboso sobre ellos.

R: Una de las principales razones que me movieron a escribir este libro, fue la de presentar un tema complejo de forma fidedigna y no tan amarillista como podría ser (salvo la portada que puede resultar un poco espeluznante). Es muy fácil hacer un circo con una temática como la de los asesinos en serie. Lamentablemente, al ser presentado de esta forma, dicha investigación corre el riesgo de transformarse en algo más amarillista que otra cosa. Quizá, bajo un punto de vista más simplista, si el único objetivo del autor es despertar el morbo de sus lectores y contar historias exageradas, inflando el número de víctimas del asesino, esperando impresionar o provocar pesadillas, me parece relativamente válido. El problema es que varios de estos casos, tocan fibras bastante sensibles, sobre todo para aquellos que han sido víctimas directas o indirectas de este tipo de criminales. Como mi idea no es la de hacer una apología al crimen violento, decidí redactar todo de forma directa, fidedigna y con una bibliografía sólida, sin caer en el morbo. Al mismo tiempo, tampoco utilicé un lenguaje excesivamente técnico pues, finalmente, esta recopilación de biografías tiene el fin de entretener a aquellos a los que este tema les resulte interesante; pero no sin anteponer un marco teórico que explique bien el fenómeno y el porqué es necesario que documentos de esta índole sean perpetuados.

P: ¿Quedaron casos por incluir en otra entrega o éste sería un libro único?

R: Para ser sincero, quedaron muchos casos fuera. Tanto que podría escribir uno o dos libros más. Me han hecho varias preguntas por un segundo volumen pero, por ahora, no he conversado al respecto con la editorial, aunque no lo descartaría.

P: Existe una serie de libros chilenos llamados “Historia freak de…”. Con la cantidad de información que manejas sobre asesinatos, ¿has pensado en elaborar un libro exclusivo de datos “freak” como los que comentas en el libro sobre los músicos que compraban artículos pertenecientes a asesinos seriales?

R: Claro. A medida que empecé a investigar sobre el tema, la cantidad de datos curiosos respecto a la cultura pop y los asesinos seriales, se incrementó de forma asombrosa. Referencias a asesinos en serie en la música, el arte, el cine o la televisión, muestra un abanico enorme de posibilidades.

Por ejemplo, Netflix dio un bombazo taquillero con la serie “Mindhunter”, historia basada en hechos reales que narra las entrevistas realizadas por los agentes del FBI Robert Ressler y John Douglas a varios “serial killers” de los años 70 en Estados Unidos.

En unos meses más, tendremos al actor Zac Efron personificando a uno de los peores asesinos seriales de la historia, Ted Bundy. Y aunque no se trata de un asesino serial, DiCaprio y Brad Pitt se han unido a Tarantino para grabar una cinta sobre Charles Manson, otro de los más famosos criminales del último siglo.

Como ves, datos hay de sobra. Un libro sobre la cultura pop y los asesinos de este tipo, es bastante factible.

P: ¿Proyectos futuros?

R: La verdad, sí. Además de escribir, también me dedico a dibujar y hacer cómics. El año 2016, publiqué mi primera novela gráfica, llamada “El Corvo Beltrán”.
En estos momentos, me encuentro trabajando en otra novela gráfica que trata sobre personas que fueron exhibidas en circos “freaks” en EE.UU. y Europa durante los años 1900 y 1960 aproximadamente. Historias reales sobre las cuales me he documentado y espero tener lista a finales del 2019.

P: ¿Autores o referencias literarias favoritas?

R: Allan Poe, Horacio Quiroga, Julio Cortázar, Patrick Süskind, Franz Kafka. También otros autores de novelas gráficas como Charles Burns, Daniel Clowes, Suehiro Maruo, Shintaro Kago o Robert Crumb.

P: ¿Cuál es tu música favorita que te ayuda con el trabajo de creación de tus obras?

R: Nirvana, Alice in Chains, Chris Cornell, Pantera, The Mars Volta, At The Drive In, The Fall of Troy, Mac Demarco, System of a Down.

P: ¿Series o películas que recomiendes relacionadas con el tema de tu libro?

R: En series, “Mindhunter” es la que más me ha gustado al respecto, principalmente porque explica el origen de la investigación sobre los asesinos en serie (aunque tiene algunos errores y los típicos estereotipos utilizados por el director David Fincher, pero es sumamente disfrutable). “Dexter” no la puedo ver ni en pintura la verdad. En películas, recomendaría: “Seven”, “Mi amigo Dahmer”, “Monster”, “Henry, retrato de un asesino” y “Citizen X”.

1 comentario:

  1. Hola gracias por la entrevista siempre es bueno conocer a nuevos escritores. Saludos.

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