Absolum

El 16 de mayo de 2011, diez cadáveres calcinados aparecieron en el fundo Los Pinos, ubicado a unos 50 kilómetros de Santiago de Chile.

Así comienza el nuevo libro que nos presenta Carlos Lloró, llamado “Absolum” a través de su propia editorial llamada Ediciones Nagauros. Es una novela fantástica, donde rinde homenaje a la literatura chilena, en especial a la poesía de nuestro país, con un título que recuerda a un misterioso laberinto encontrado en Creta, llamado con ese mismo nombre.

El libro nos relata lo ocurrido entre marzo del año 2000 y mayo del 2002, partiendo con la difusión de un manuscrito sobre lo ocurrido, por parte del teniente Alsacio Aravena, quien intentaba llegar a la verdad sobre lo ocurrido en ese lugar, encontrando múltiples obstáculos en el Fundo Los Pinos, donde Gonzalo Esigábal era su propietario.

Gonzalo Esigábal era un joven ingeniero en minas, amante de la literatura, quien tiene una gran inquietud sobre la alta tasa de suicidios de poetas en Chile. De esa manera surge su interés por querer ayudar a los poetas nacionales, consiguiendo una gran casona en el Fundo Los Pinos, con grandes jardines y un laberinto renacentista. Luego obtiene un listado de los poetas que no se han suicidado y que viven en una situación de riesgo social, clasificándolos a través de distintas características, incluso por su nivel de talento. De esa manera, instalaría a los escritores en esa casona, donde estarían bajo su cuidado, pagándoles un monto para sus gastos personales y otras facilidades que ayuden a desarrollar su trabajo sin problemas y sacarlos de la idea de suicidio que, según él, rondaba a los poetas del país.

De esa manera, el mecenas forma esta agrupación, pero desconoce el final de muchos experimentos creados de manera similar en otras latitudes. Así la convivencia y las situaciones vividas por los poetas en el sitio donde fueron reunidos, se clasificaron en tres etapas por uno de los mismos poetas, la Edad de Oro que abarca los primeros 6 meses de vida de la comunidad, la Edad de Plata y la Edad de Sastre. En cada una de estas edades se muestra una ficha técnica de cada uno de los participantes, además una serie de cartas que escriben, donde van contando sus experiencias y el proceso de decadencia que experimentan como grupo.

La novela comienza entonces, como una novela detectivesca, que pronto va avanzando a un relato de intrigas y luego pasa al terreno metafísico, a la obtención de la iluminación, que cada vez nos va atrapando más y más, involucrándonos dentro de la trama para conocer su final lo más rápido posible, ya que se espera que sea escalofriante.

Al principio, o Edad de Oro, los poetas reunidos obtienen una atención muy buena por quien los ha reunido y eso les lleva a tener una buena relación entre ellos, con conversaciones sobre literatura y autores principalmente chilenos, generando un alto grado de creatividad literaria.

En la Edad de Plata comienzan a aparecer inconvenientes sobre las condiciones del lugar y el trato de quien los ha reunido, lo que va perjudicando el rendimiento intelectual de los poetas y sus sensibilidades, donde el laberinto del lugar y la biblioteca comienzan a tener un rol cada vez más protagónico para los poetas, tanto física como en el interior de sus propias mentes, llevando a la Etapa de Sastre donde se expone que lo creemos como real es artificial, visitando un laberinto equivocado, donde comienzan a jugar fuerzas desconocidas, secretos provenientes de una de las familias más antiguas de Chile. Así los poetas iban a escribir a ese lugar, pero también el lugar los fue escribiendo a ellos, dejándoles a ellos la elección entre dos caminos, que los podrá llevar a la iluminación o a la locura. ¿Hasta dónde llegará el límite que separa la vida de sus propias obras?

En definitiva, es un hermoso libro, escrito con mucho amor por la literatura, donde nos invita a ser testigos del suspenso y la emoción al darle una oportunidad a la “otra literatura”, alejadas de ferias y vitrinas, de culto, accediendo a los micromundos planteados por Carlos Lloró y que resulta muy mágico, invitando a ingresar al fascinante laberinto de la mente y encontrar un final que el propio lector podrá interpretar a su manera, donde en lo personal, el tema del laberinto me produjo gran misterio. Vamos entendiendo que, para salir del laberinto, se debe llegar al centro del laberinto y debemos derrotar a un gran Minotauro, para lo que tendremos que luchar mucho. Existen diversos caminos, pero solamente orientarse en el centro es la manera de alcanzar el objetivo. Una vez se llega al centro podemos buscar salir de él y así resucitar dentro de nosotros, liberando nuestra mente y nuestra alma.

¿Dónde encontrar el libro? Contactando al profesor Carlos Lloró directamente en redes sociales.