S.I.C. Sistema Integrado de Consciencias

Título: S.I.C. Sistema Integrado de Consciencias
Autor: Cristhian Amengual
Edición: Áurea Ediciones, 2019
Sello: Soyuz
Edición general y diagramación: Martín Muñoz Kaiser
Portada: Christoph Peters

Ilustraciones interiores: Claudio Ahumada

Corrección de textos: Rodrigo Muñoz Casaux
Número de páginas: 241

A veces una portada se aleja bastante del contenido del libro y, en el caso de S.I.C., el diseño del tremendo ilustrador Christoph Peters, muestra el mundo en el que se desarrolla la historia creando en nuestras mentes un contexto de la novela, donde vemos esas fantásticas naves llamadas “neus”. Ese mismo trabajo mental es el que profundiza de manera impecable el autor Cristhian Amengual, ya que su historia se aleja un poco de las naves y batallas espaciales. Más bien tiene que ver con la exploración de la mente humana desde un futuro distante.

La historia se desarrolla desde el año 1985, cuando se crea el primer opilión, que es un artefacto implantado en la nuca de las personas para luego ser analizado por la psicociencia, después de fallecer su huésped. Esta época, que proviene de la nuestra, termina el año 2196 cuando ocurre el Reset Day, para luego comenzar la Época Talmen o “Año 0”.

En aquel Año 0, a los humanos se les mantiene recluidos en un domo, por parte de los talmen, quienes son los primeros humanos evolucionados creados el año 2007 y que pronto forman una organización social llamada Trifekta. Luego de este Reset Day, se crea un Sistema Integrado de Consciencias (S.I.C.), donde se puede experimentar la vida de otro individuo, sumergiéndose en sus mentes por medio del mejor desarrollo de los opiliones. En la trama vemos a Bulsara Stoich, un lagarto humanoide, quien desea vivir la vida de su padre muerto, con la ayuda de esclavos humanos, lo que crea una revuelta en este lugar.

Ruy, un joven talmen, sabe que el S.I.C. está presentando unas anomalías y desea darlo a conocer a unos seres superiores llamados Aleff, quienes son los mandamases de Trifekta. Con su historia vamos comprendiendo el funcionamiento de este Sistema, que une las neuronas humanas implantadas con la materia oscura existente en el universo. De esta manera se conecta al humano con la creación misma, a través de una tranflexión, que es el proceso de conexión, por medio de unos pozos que ayudan a conectarse con el humano fallecido o huésped de los opiliones. A estas personas fallecidas se les llama sahayaak. A Ruy le llama la atención la Época Óbito, una etapa miserable de la humanidad.

La conexión con el opilión implantado en cada humano (especie de disco duro del individuo) se realiza de manera completa, donde el que se conecta puede hacerlo con cualquier cuerpo fallecido, ya que en el opilión se guarda toda la información de este. Ruy logra identificar esa anormalidad como una invasión de algo o alguien en el pozo de conexión.

A través de la investigación de la anomalía por parte de este joven talmen, junto a sus amigos, los Aleff van encontrando un problema en aquello, ya que se acerca demasiado a los oscuros secretos que oculta la Trifekta, que también tiene relación con la revolución armada de los humanos contra los ellos. Ruy  intenta de manera obsesiva, averiguar sobre las interferencias, que están ligadas con el suicidio de Román Stoich. Por otra parte, la Aleff llamada Mercury intenta averiguar qué ocurrió con Bulsara Stoich, saber quién es Maedukar y por qué hay humanos que se pueden conectar sin implantes. 

El trabajo mental que introduce el autor del libro se relaciona mucho con la muerte y en especial con el suicidio de los humanos, que comenzaron a hacerlo en la llamada “Época Óbito”, en el año 2180 y que nadie podía detenerlos, ya que esperaban alcanzar un nivel que solo con la muerte se podía encontrar.

El autor trabaja mucho con las percepciones extrasensoriales, advertidos por el humano como eventos subliminales. Para esto utiliza elementos filosóficos para comprender el destino de nosotros, no desde el punto de vista tecnológico, sino como seres pensantes. A través de esos seres evolucionados llamados “talmen”, se busca explorar la mente actual del ser humano, cosa que resulta muy interesante y que hace devorar el libro.

La descripción de los seres que habitan este ambiente es diferente al nuestro y Cristhian Amengual lo va haciendo de manera paulatina, comprendiendo e imaginando lentamente el aspecto que ellos pueden tener. También existen inteligencias naturartificial (INA), naves como medios de transportes y mucha otra tecnología que se utiliza de manera delicada, para no saturar la historia con elementos innecesarios.

La única crítica es respecto a la trama del libro, donde cuesta un poco comprender hacia donde se dirige o el principal conflicto. Sin embargo, el tema desarrollado es tan interesante, sobre leer la mente desde el futuro de gente fallecida y captar instantes de la vida de ese ser humano, que la verdad es que logró captar mi atención en todo momento por lo novedoso que es. Otro detalle es sobre la ambientación un poco forzada de nuestro país, ya que se mencionan lugares de Chile como Isla de Pascua o el desierto de Atacama, que no tienen mayor trascendencia en la historia que podría quedar como un lugar “X” del planeta Tierra.

“S.I.C.” es un libro muy filosófico, sobre la mentalidad de trascender del ser humano y un Reset Proyect que cambiará al mundo totalmente. Además, la edición de Áurea Ediciones es buenísima, con una portada maravillosa e ilustraciones para cada capítulo que adornan un libro hermoso de una visión sobre el futuro de nuestra humanidad, que está tan bien relatada que uno se lo imagina como algo muy probable de ocurrir, acorde a una ciencia ficción dura.