Andrés Urrutia nos presenta su ópera prima con el libro “Hijos de la ira”,
publicado por Loba Ediciones el año 2018.
Un libro que se podría catalogar como de fantasía o terror, pero a medida que
se va leyendo se va comprendiendo que este libro es mucho más que eso. Su libro
reúne mitos y leyendas de nuestro país, provenientes del relato oral, contado a
través de una excelente historia, independiente de la “etiqueta” o género que
se le quiera dar.
“Hijos de la ira” está ambientado en un
Chile post-Independencia, donde los que manejan un poco de historia de nuestro
país, podrán identificarla de inmediato en la época en que existía un Director
Supremo. Sin embargo, el autor no menciona personajes históricos, ya que no es
su objetivo que se ubique su historia en un año puntual. Su intención es
generar el ambiente propicio para que el lector observe la vida que se
desarrollaba en torno a las haciendas, que durante siglos fue uno de los
pilares fundamentales en los que descansó la estructura social chilena. Para
eso recrea de manera perfecta el orden jerárquico, con patrones, inquilinos y
peones, lo que será muy importante en el desarrollo de la novela.
La estructura de la novela una serie de
cuentos, que se van uniendo para transformarse en una novela Para eso cada
cuento tendrá su título y duración distinta al anterior. Hablando sobre la
historia completa, ésta inicia cuando una abuela cuenta una historia bíblica a
unos niños, hijos de trabajadores de la hacienda en la que viven. Entre ellos
se encuentra Pedro, un adolescente de 14 años, quien es huérfano, por lo que
los demás chicos lo insultan por ser “huacho”. Tuvo que crecer solo y pobre,
sin respuestas a sus preguntas y crecer muy rápido al tener que trabajar desde
pequeño. Un día al ver un ave hizo la invitación al Tue Tue de manera inocente,
sin conocer sus consecuencias, lo que sumado a un extraño sueño que vive
durante un tiempo, provocan que una bruja llamada Alegría vaya en su búsqueda
para convertirlo en un brujo. Para hacerlo debe pasar por una serie de pruebas,
donde deberá entregarse a su nuevo amo y así este joven renombrado por él mismo
como Caín, pasa a ser un Kalku o Brujo por sus males. De esta manera, llega
donde sus nuevos compañeros de la “Mayoría” para convertirse en uno de ellos y
así provocar el caos.
Alegría es una bruja que desea mantener
el legado y las tradiciones de los brujos ancestrales, por lo que ante la vida
displicente que están viviendo junto a la reina Soledad, ella desea revelarse
en su contra. Soledad en el trato que lleva con los hombres, provocará, según
Alegría, que se les olvide a los brujos y se les pierda el respeto, es por eso
que ella busca que se les recuerde y se les tema. Por lo tanto, por medio de
esta rebelión, intentará quedarse como la Reina e imponer sus propias normas
contra los hombres.
Cómo primera misión le pide a Caín que
vuelva a su hacienda de origen y desatar el caos en ese lugar. Miguel, que vive
en ese lugar, siente que un brujo ronda en la hacienda, mientras que Aurora, la
hija del patrón, reconoce a este brujo y por eso se queda con su challanco, que
es la piedra del conocimiento de los brujos y donde se aloja el alma de ellos.
Para que Caín pueda recuperar su challanco tendrá que buscar el Libro de los
Brujos, ganado por una machi a un brujo español en Chiloé. Mientras Aurora,
gracias al challanco obtiene información sobre el paradero de su hermana mayor,
perdida hace años, por eso va en búsqueda de ella, con la ayuda de Miguel.
Canillo fue un pequeño niño que dentro
de él habitaba un ser llamado wekufe, al que los demás mapuches deciden
matarlo, por lo que desata su ira con ellos. De esta manera intentó hacer
desaparecer el sol y las estrellas, pero un pillán ayudó a los mapuches y quedó
prisionero en una gran cueva.
De esta manera quedan presentados los
personajes que irán interactuando de alguna manera, pero la historia de cada
uno de ellos será bajo un cuento propio. Ahí está la genialidad el autor, al
hacer interactuar cada leyenda de nuestro país en cada cuento escrito en este
libro, bajo distintas misiones que tendrá cada de uno de los personajes, pero
el elemento en común es la provocación del caos.
Andrés Urrutia reúne uns gran cantidad
de relatos orales en torno a la brujería en Chile y otras leyendas, para contar
una muy buena historia. Dentro de la novela va realizando comparaciones de la
religión mapuche y la cristiana, por medio los distintos personajes. También un
elemento importante queda reflejado en la historia que gira en torno a la
leyenda del libro entregado por John Dee a la machi Chilpilla en Salamanca.
Otro aspecto muy interesante es la cosmovisión mapuche, que es contada de
manera maravillosa bajo unos viajes a tiempos que no son el tiempo conocido por
nosotros. Un viaje espectacular.
Dentro de los mensajes que va dejando
la novela “Hijos de la ira”, se muestra lo que provoca en un niño la pérdida de
todo en su vida, los abusos, la falta de oportunidades, las burlas, la
invisibilidad, provocan que deseen algún cambio en su vida llena de miserias,
muchas veces eligiendo un camino equivocado.
La obra de Andrés Urrutia es un hermoso
relato que muestra la transformación de un joven en un brujo, sus motivaciones
para hacerlo, en lo que se convierte y en las consecuencias en su vida.
Conoceremos cuál es el fin que buscan los brujos y sus diferencias con las
machis. Para eso utiliza los relatos orales en torno a los brujos de nuestro
país, construyendo una historia muy coherente, dando su propia de versión de
aquellos relatos. Un libro altamente recomendable.
¿Dónde conseguirlo?
En las principales librerías del país,
como Antártica o Qué Leo y en la página de Loba Ediciones:
Hola! «“Hijos de la ira” está ambientado en un Chile post-Independencia, donde los que manejan un poco de historia de nuestro país, podrán identificarla de inmediato en la época en que existía un Director Supremo.» Ya con esto suena muy, muy interesante. Dudo encontrarlo por acá, pero si tengo oportunidad, me da curiosidad.
ResponderEliminarUn besote!