Elemental: La Saga de Los Portales

Fabiola Castillo presenta la primera parte de la “Saga de los Portales” el año 2015 bajo el nombre de “Elemental”, publicado de manera independiente. Este es el primer libro de una tetralogía de fantasía épica, donde los cuatro libros ya se encuentran disponibles para sus lectores. El primer libro contiene 584 páginas y está basado en Chile, ya que menciona distintas localidades de nuestro país.  

Su portada indica muy bien lo que se viene durante el libro, ya que podemos ver dos jóvenes conectados con la naturaleza que les rodea. En lo personal tenía ganas de leer este libro hace bastante tiempo y por fin lo hice, lo que fue una buena decisión ya que cumplió con las expectativas que tenía acerca del libro.

Es una historia de fantasía para público infanto-juvenil, sin embargo, es de esos libros que un adulto puede y debe leer, por el mensaje de la historia. Relatada a través de una joven llamada Dru, recordando su infancia, aunque la historia también alterna la narración con un ser llamado “ELLA”. Dru (en realidad se llama Druidesse pero su diminutivo es Dru) tiene 10 años y se encuentra de vacaciones en comuna de La Reina. Desde un principio comenta su pasión por el trekking y sus excursiones al Parque Mahuida. Sus padres deben ir a un viaje a Europa, por lo que ella quedará sola en Chile. En la búsqueda de un crecimiento personal e independiente, recorre sola la pre cordillera y en una de esas expediciones conoce a un niño, quien de inmediato le resulta misterioso y enormemente atrayente. Él se llama Fabro y le enseña diversas técnicas para enfrentar mejor los distintos senderos que en ocasiones sueles ser muy arriesgados. El misterioso Fabro debe prepararla para un futuro que Dru jamás esperaba.

Al corresponder a una saga con una tremenda historia, personalmente encontré necesaria la larga descripción del personaje de Dru y la construcción de su personalidad, ya que de no haber sido de esa manera no habría entendido la estrecha relación con sus padres a quienes llama por sus nombres, Leo y Paty, ni con sus amigos. Sus amigos son Olivier, un niño con gran talento para los deportes y de aspecto atractivo, quien debe luchar contra los deseos de su padre que quiere hacerlo practicar su deporte preferido y enseñarle una estricta disciplina, pero Oli no quiere eso, mientras su madre es sobreprotectora con él. Ana o “Any” es mayor que Dru y Oli, es amante del rock, de las artes plásticas y es una niña a quien le cargan las injusticias que se cometen contra ella y sus amigos, por lo que constantemente se encuentra metida en riñas. Pronto aparecerá Fabro en el camino de Dru, que coincidirá con un momento terrible en la vida de ella, para luego desaparecer.

Debido al acontecimiento terrible para Dru, va encontrando un cierto sentido a un libro que ella había comprado un tiempo atrás, el que será clave para lo que le tiene preparado su destino. Ella pronto tendrá que mudarse a Osorno, por lo que debe mantener una amistad a distancia con Oli y Ana. Mientras va creciendo hasta convertirse en una bella joven, pero siempre dedicada a su máxima pasión, el trekking. Con constantes visitas pasajeras con sus amigos, luego de siete años deciden compartir un verano juntos, donde se une al grupo una amiga de Dru, llamada Ada, quien posee el mismo misterio que alguna vez tuvo Fabro. Ese verano sería el comienzo de sucesos que cambiarán la vida de este grupo de amigos y Dru deberá tomar decisiones trascendentales para ella en el amor y la misión que el destino le tiene preparada a través de los “elementales” para poder salvar a la humanidad. Es así que comienza la arriesgada misión, recorriendo distintos lugares de nuestro país y del mundo, apareciendo personajes que le ayudarán y otros que pondrán en riesgo su vida. 

La descripción que la autora hace de Dru como niña y luego, como adolescente es muy profunda, porque se hace cargo de diversas problemáticas por las que pasan los jóvenes como parte de su crecimiento, y para ello su autora se apoya en los amigos de Dru, unos personajes muy potentes, bien definidos, que hacen un complemento perfecto para tratar conflictos en los estudios, relaciones personales, relación con los padres, bullying, etc. Las reflexiones que tiene Dru, de 10 años pueden ser un poco incomprensibles en un inicio, por ser demasiado profundas para una niña de esa edad, pero al tratarse de un relato contado por ella misma ya mayor, se entiende que es la reinterpretación de lo que pensaba en esos años de vida.

El mensaje más significativo es el del amor por la naturaleza. La conciencia por nuestra tierra que debe venir desde las conductas que transmiten nuestros padres y en este caso por Leo y Paty. Todo este amor por la naturaleza y entregarle el valor correspondiente a cuidar de ella, es relatado de una manera muy entretenida mediante una historia de fantasía, por lo que el público a quien está dirigido el libro conectará muy bien y además, con mucha psicología su protagonista emite una crítica social, la que ayuda a crear una mayor conciencia sobre nuestra problemática ambiental y ecológica.

Solamente me queda recomendar esta original historia, que me deja con un tremendo suspenso para continuar leyendo la saga y así conocer el desenlace que puede tener nuestro planeta, con el avance de la deforestación, los incendios forestales, la invasión del territorio habitado por animales silvestres, etc., ya que, si la Gaia decide vengarse, puede ser el fin de la especie humana.

¿Dónde conseguirlo?

Toda la saga se encuentra en formato digital por Amazon y en las distintas redes sociales pueden consultar por los formatos físicos que alguno de los tomos.